Mujer cojedeña en el archivo de Carlos González
ÚNICAMENTE TU COLOR (Alberto
José Pérez)
Únicamente
poseo tu color que es mi piel
la
brisa que tiende míos cabellos al norte
de tu
respiración ajena
presumo el abandono de rutas
expande por mi cuerpo
sales
de lujuria permanente
abárcame como el sol a las montañas
antes
de vestirnos los ojos de relámpago
EL
BESO (Manuel Osorio Calatrava)
Yo
buscaba su alma en los temblores
de
su voz cuando hablábamos, y había
una
vaga y azul melancolía
en
la plata lunar de los alcores.
Buscabala
en sus cándidos rubores
cuando
su mano estaba entre la mía,
y
en la estrella lejana que encendía
sus
ojos en celestes resplandores.
Yo
buscaba su alma, hasta que un día
ardió
la esquiva flor de sus pudores
en
el oculto fuego en que yo ardía;
entonces,
en un tálamo de flores
descubrí
que su alma se escondía
en
sus labios, divinos pecadores.
Versos de Anita Mendoza
También
yo me dormiré
y
entonces quizás te despiertes
y
pienses esto que yo estoy pensando,
tal
vez me imaginarás
enredada
en algún árbol enmarañado
de
los que sabes que me encantan
y
me quieras alcanzar tocándome,
sacándome
del mutismo
de
estación de radio apagada,
volviéndome
a traer hacia tu lado,
hacia
el amor que nos dio el sueño.
Versos de Corina Noguera
Arias
al
sondear mis abismos
sembraste
de alegría
el
valle de mi ausencia,
esa
ausencia de luz, amor
y
estrellas, esa
la
misma que sigue midiendo
mi
tristeza.
Imagen el archivo de Elena Marval
Poema de Nieves Clemente
De aquelarre era la noche
y tu vestido de brujo
hechizando aquel embrujo
el camafeo del broche.
Sin el adiós del reproche
nos vestimos lentamente.
El lecho aún ardiente
dueño era del secreto
donde te perdí el respeto
yendo acuñado en la frente
Poema de Danilo Mauricio
Robinson Garcés
Sonámbulo
en mi cáliz
Despierto.
Y no recuerdo el roble
Amanece
hace buen tiempo
Y
me queda el recuerdo vago
De
tu pecho sobre el mío
De MAGAS (Fragmentos. Faver Páez)
a
su paso sumisas
se
rendían las horas
eran
las sorprendentes
soberanas
de las maravillas
reinando
sobre los deseos
y
las sangres urgidas del verano
corriendo
por la casa los domingos
como
dos aguas vivas
repartiendo
milagros de belleza
por
los patios y los corredores
ardían
de puro fuego interno
y
cuando graciosas
asomaban
sus rostros
al
ventanal del día
detrás
de sus cuerpos maduros
retozaban
el gozo
y
la delicia
no
estoy seguro aún
pero
sospecho que ellas fueron
las
últimas magas de la tierra
Imagen en el archivo de Mariela Romero
Poema de Rafael Cadenas
Tú
que caminas esta noche en la soledad de la calle, vas llena de besos que no has
dado.
Del
amor ignoras la escritura prodigiosa.
Aunque
no me conoces, en mi cuerpo tiembla el mismo mar que en tus venas danza.
Recibe
mis ojos milenarios, mi cuerpo repetido, el susurro de mi arena.
Imagen en el archivo de Hmendez Art Telier
2
(Mario Ledezma)
A qué cambiar de tiempo
si la nostalgia
anda que nos aprieta el cuerpo
el ruido de tu playa
encabrita mis días
Tú mi montaña
mi letra vocal
alga dolida de la piel
mi mar
tus fuentes de agua
marchan hacia otros ríos
NO
ES POR LA PUNTA DE HIERRO
(Víctor Manuel Pinto)
No es por la punta de hierro en las botas
que va despacio de un lado a otro
y equivoca las medidas de las llaves
Todavía carga
el malhumor de la mañana
cuando su mujer
sacó la cara hacia fuera
durante el beso de despedida.
Versos de Miguel Pérez
“Hay una mujer que ronda mis pasos.
Hay
una mujer que me cuida.
Hay
una mujer que vigila mis libros
Hay
una mujer que no me quiere.
Yo
la amo a ella”.
MODELOS
PARA CARTAS DE DESAMORES
Y DE
AMORES EN LA CIUDAD DE LOS ESPEJOS
(Isaías
Medina López)
Modelo I
Bajo cero cuando mucho fue encontrarte
Modelo II
Das igual aquí o ausente
Modelo III
Besar el fuego al menos es peligroso
Modelo IV
Tú aunque sea muriendo
(Posdata: Existir sabe a ti)
Versos de María Luisa Lazzaro
Versos de María Luisa Lazzaro
Amor,
la oscuridad
se adueñó de tu planeta,
la claridad poseerá mañana
calles y avenidas,
y volverá el manto oscuro
de entonces
a brillar por las estrellas.
Y yo,
princesa del Medioevo,
con una voz que no llega,
encarnando el cuerpo romántico
de una dama,
dueña de unos versos,
de un pensamiento solitario,
de un indomado orgullo,
de un furioso encuentro con la duda.
Desvelada espero…
con el vestido amplio
de gasa y vuelos,
y un pañuelito en el suelo.
Versos
de Mariela López
¿Dónde
quedan todas las nostalgias que he tenido?.
¿Dónde
quedan todos mis destinos?
¿Dónde
queda mi principio?.
¿Dónde
duermo después de mi muerte?
¿A
dónde fueron a parar mis ojos luego de verte?
¿Dónde
está el fin de mi cordura?
¿Dónde
queda ahora mi vida,
sino en la tuya?
sino en la tuya?
Imagen en el archivo de Germán Pérez
2 comentarios:
Wonderful all poems
I loved the poems of Mariela Lopez today
Todos os poemas são preciosos porque falam de amor .
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