lunes, 15 de febrero de 2016

Poesía de Amores y Desamores (14)

Alysmar  Garcés (San Carlos, Cojedes)



Poema de Ida Gramcko
Nadie escoge su olvido.
¿Para qué si la ausencia
recuerda lo que fue y el raudo nido
prosigue sin cesar en la apetencia?
¡Vuelve!, grita el amor, y lo que ha sido
es en su grito nueva transparencia.
Inmenso ser inmerso en el pedido
devuelta está tu voz, tu confidencia,
tu secreto, tu piel, tu repetido
fiel hontanar que nunca es la carencia
sino el cambio de sitio, el transferido
sitial a otro dulzor, a otra potencia.
No, devolverte no. Lo mantenido
queda aunque escape su vivaz secuencia.
Vives aquí y allá, tan trascendido…
Amor, no estás y bulle tu presencia.
Nada dice: prohibido.
¡Entrad!, dicen las puertas de la ausencia.




BREVE HISTORIA DE AMOR (Gonzalo Fragui)
                                            A mi padre Juan Bautista Molina
Mi padre tiene 25 años
Mi madre acaba de cumplir los quince
Quería ser maestra,
pero terminó de enfermera,
gracias a un curso por correspondencia.
Mi padre tiene 25 años
monta su caballo
sin mirar a nadie
Unos tragos encima
y un arma en su chamarra.
Mi padre es otro cuando monta en su caballo
Seguro de su juventud y su belleza
tiene una pasión desaforada por las muchachas y los retratos
Aunque últimamente anda intranquilo
por esa pelirroja que ha llegado al pueblo.
Mi madre lo divisa con cautela
Le parece haberlo visto en películas mexicanas
que daban en el viejo cine
de la Calle El Calvario en Pregonero.
Mi padre tiene 25 años
y no entiende de mi torpeza con los caballos
Mi madre me envía a estudiar a la ciudad
para tratar de salvar lo que se pueda.
Mi padre siempre tuvo 25 años
Mi madre,
quien ahora tiene 80,
viene a traerle café
y entonces
mi padre
se baja del caballo 
y guarda su foto en la cartera.





Versos de Florencia Hogreul Fuenmayor
Soy entonces la vida que se dobla
La sombra que te sigue donde quiera
El movimiento de la danza que te lleva al teatro.

Olvidada
Sonrió a los espejos para llamar a tus ojos
Y encuentro solo el lenguaje que me aqueja

Soy entonces el resguardo de la locura
La razón efímera de un viaje
¿Soy acaso el dilatado amor que todo lo llena?


EL CAMINO DEL RECUERDO (Eduardo Alí Rangel)
El camino del recuerdo
se enfloró de alba y amor,
alba de tus manos blancas,
amor de tu corazón.

Mi copla sigue afanosa
la ruta azul del ensueño,
armonizando de amores
la placidez del sendero.

Dos tonalidades fraguan
rumbos de adiós y ternura...

Estoy sintiendo la ausencia
desmenuzada en nostalgias,
que salpica desde lejos
la inmensa cárcel de mi alma.

Pero mi copla armoniza
los rumbos de tu partida...

¡Deja que tenga fragancias
mi verso para tu amor
y enflore la ruta inmensa
con el alba de tus manos 
y amor de tu corazón!


AMOR MÍO NO DEJES DE MIRAR EL ALBA 
(Alberto José Pérez)
Amor mío no dejes de mirar el alba
que la estrella de la mañana
ilumine siempre tu rostro

no dejes de cantar
que sea tu voz
la que borre las muertes que no quiero recordar
que sean tú y el horizonte magnífico de mi tierra
mi copa de belleza

amor mío no dejes de mirar el alba
que la poesía es la bandera de los sueños del hombre
la pasajera de los viajes del barco fantasma de Elí Galindo
la que cuida el inventario de mis muertos

amor que tus pies marquen el tiempo
de la canción que quiero para ti
pero no dejes de mirar el alba
y libre como el pájaro león canta.

Imagen en el archivo de Ninex Méndez Pieters 

CAMINOS SECRETOS (Fragmento. Ylse Godoy)
Las sales del desierto de mi lago
Quemadas como hojas muertas.
Tu cuerpo, lugar sagrado de la lluvia
Relampaguea como culebra de mil cabezas.
Mis antepasados olvidados por el tiempo
La tarde es fría
Paramos sacudidos
Como rosario de música lejana
Ocultando los caminos secretos.
El encuentro de los amantes.
Desafíos a la muerte
Con las mejillas frescas
Por el río del amor.


POEMA DE LUZ MARINA ALMARZA‏
Más
Déjame 
Déjame que te ame
mientras tenga frío,
esté prendida la lumbre,
tenga donde cobijarme;

Mientras te espero.
Mientras estás.


Imagen en el archivo de César Seco

EL AMOR A VECES (Fragmentos. Rodolfo Quintero Noguera)
 El amor a veces
como una ausencia
un silencio
un devenir
sin mañana
 Como esta casa
oculta
en la memoria

Como un cielo
incauto
 Como un pez
espada

Como un abismo
insospechado
en la palabra
 Como una escena
Repetida
de la lluvia

Como una lágrima
un olvido
un adiós
Como un puñal incluso
el amor a veces.


Imagen en el archivo de  Carlos González 


VITRAL DE MUJER SOLA (Yolanda Pantin)
Se sabe de una mujer que está sola
porque camina como una mujer que está sola
Se sabe que no espera a nadie
porque camina como una mujer que no espera a nadie
Esto es
se mueve irregularmente y de vez en cuando se mira los zapatos
Se sabe de las mujeres que están solas
cuando tocan un botón por largo tiempo
Las mujeres solas no inspiran piedad
ni dan miedo
si alguien se cruza con ellas en mitad de la vereda
se aparta por miedo a ser contagiado
Las mujeres solas miran el paisaje
y se diría que son amantes
de las aceras/ de los entresuelos/ de las alcantarillas/ del subsuelo
de los subterfugios
Las mujeres solas están sobre la tierra al igual que sobre los árboles
les da igual porque para ellas es lo mismo
Las mujeres solas recitan parlamentos
estoy sola
y esto quiere decir que está con ella
para no decir que está con nadie
tanto se considera una mujer sola
Las mujeres solas hacen el amor amorosamente
algo les duele
y luego todo es más bien triste o colérico o simplemente amor
Estas mujeres se alumbran con linternas
van al detalle
saben dónde se encuentra cada cosa
porque temen seguir perdiendo
y ya han perdido o ganado demasiado
Ellas no lo saben
porque van del llanto a la alegría
y a veces piensan en la muerte
También planean un largo viaje e imaginan encuentros posibles
Administran el dinero
compran legumbres
trabajan de 8 a 8
Si tienen hijos hacen de madres
son tiernas y delicadas
aunque muchas veces se alteren
un pensamiento recurrente es
ya no puedo ni un minuto más
Las mujeres solas tienen infinidad de miedos
terrores francamente nocturnos
los sueños de tales mujeres son
terremotos catástrofes sociales
Una mujer sola reconoce a otra mujer sola de forma inmediata
llevan el mismo cuello airado
lo cual no quiere decir que no quieran a nadie más que a sí mismas
esto es completamente falso
Lo cierto es que la casa de una mujer sola
está abierta a su antojo
Una mujer sola
no puede curar su soledad
porque nada está enfermo
se remedia lo curable
una gripe o un dolor de estómago
La mujer que piense que su soledad es curable
no es una mujer sola
es un estado transitivo entre dos soledades
infinitamente más peligrosas
Una mujer sola es una mujer acompañada
aunque de este hecho no se percate más que el zapato
al que mira con detenimiento
o el botón
que parece representar algo verdaderamente importante
como de hecho lo es
como los árboles o el cielo
sólo que el privilegio que deriva de semejante atención
es más bien propio de las almas temperadas al siguiente fuego:
id contigo 
para estar con vosotros.




2 comentarios:

Nauro Torres Quintero dijo...

Que delicia de poemas con historias de amor narrados con la magia de la palabra, las imagenes de las musas y el gusto de los dioses.

Alma de Silencio dijo...

Preciosas historias y poemas. Femeninos, dulcesm realistas y con mucha fuerza. Me gustaron mucho. Gracias