VÍNCULO PERENNE (algunos poemas de Isaías Medina López)



Imagen en el archivo de Anita Mnedoza



(Carátula de la edición de La Espada Rota)

(Carátula de la edición de 1992)


EL AMOR SEGÚN ORLANDO FLORES MENNESSINI
Elija amar una mujer de esta ciudad

Divulgue a todos los amigos

encontrados en la vida

el color de su ojos y lo dulce de su piel

hasta cuando resulte imposible

volver a relatarlo

Si ella se muestra poco interesada

y cada uno de sus intentos

carece de importancia

es la ocasión ideal para mostrar entereza

Nadie puede conocer de su fracaso

y debe continuarse la imposible tarea

una vez más y de nuevo otra vez

sin temer cuántos años le lleve enamorarla

como si nada ocurriese

Pero si conociendo lo rotundo de la verdad

que dicho amor

jamás corresponderá a un hombre como usted

no tenga a menos su noble intención

Entiéndalo estuvo equivocado de mundo

y cualquiera puede errar su paraíso

No se desilusione inténtelo de nuevo

siempre quedará lugar para el último argumento

quizá mañana logre convencerla

tal vez sea su gran día

quién puede decirlo

el amor es así de caprichoso.



UNA VEZ MÁS EL VIENTO
Para el que siempre sueña

todo milagro resulta innecesario

Para el que nada sueña

todo milagro resulta innecesario



ES SUFICIENTE UNA SEÑAL
Humanidad

cuando yo te resulte demasiado incómodo

no lo hagas índice de vergüenza

Anótame en la primera justa

que en verdad valga la pena librar

llévame al campo de batalla

ojos vendados y sin armas

ordena todo el poder

de fuego del enemigo

y hazme saber que no fue en vano.


BRINDIS POR BLAS
A Blas Perozo Naveda
Estoy frente a mi tarro de cerveza

ese vínculo cierto

que tengo por el mundo

y en cuya razón

libro la culpa mortal de estar sediento


Estoy frente a su olor invencible

ante su espuma invencible

bajo su magia invencible

Al descender dentro de mí

desciendo dentro de ella cerca

pero muy cerca del cielo

y sin cambiar ni ser cambiado seré feliz

como cualquier fantasma del mundo

que ha destruido su tristeza.


ES DESEABLE VIVIR COMO LOS RÍOS
Hazlo exactamente como en tus planes

Permite a los seres vivientes

conocer tus reglas y tolerancias


De partida o de regreso

prueba a todos merecer tu orgullo propio

¿Qué es un camino fuera de tu alma?

No retengas jamás lo hecho indeseable

Ni ofendas por causa alguna a la poesía.


SAN CARLOS, 1978
Cuando quiero enterarme

de que todo está bien casi perfecto

aferro fuertemente una almohada

a mis oídos

y cierro los ojos.



AL TIEMPO QUE BAJES LA MIRADA
Ni siquiera tus ojos verán mi próxima lejanía

No soy la costumbre de una despedida

y ya has perdido el tiempo

para decir cuánto lo sientes

Quizá recorriendo la tienda de los libreros amigos

(Locos de belleza como siempre)

sientas en algunas pisadas mis propias huellas

Alguien tal vez encenderá como yo un cigarrillo

Luego oirás una sonrisa brotada de mis labios

y hasta una voz en verdad será la mía

No me podrás evitar ni querrás hacerlo

en tu lucha solitaria por encontrarme

Pero cuando termine mi espíritu

de ajustar sus largas cuentas en la tierra,

materia de mi pequeñez, seguramente

y abandone las calles frecuentes de mi asombro

verás como tu angustia también se irá

de poco valdrán tus hermosas palabras


Ya te han dicho que estoy muerto

y has empezado a comprenderlo


PAISANO
Cuando ajustes el cinturón principal de tu equipaje

cuando dispongas los enseres

que sumaran viejas memorias acechadas de tiempo


Cuando entregues

al nuevo huésped de tu habitación la llave de la puerta

advirtiéndole además sobre ese hábito particular

que heredan los objetos de su antiguos dueños


Cuando dejes la última avenida

y leas por vez final el letrero que demarca

lo que es tuyo y lo que no te pertenece

Piensa, paisano que muchos otros

quisieron regresar y no pudieron.


AL SALIR DE LA PRISIÓN LUEGO QUE EL ENFADADO SARGENTO –OJO CERRADO Y BOCA AMORATADA- 
ANTE EL RUEGO DE LA MUJER MEDIO VIEJA Y MEDIO LOCA DEJARA EN LIBERTAD AL TIPO DE LA VIOLENTA IZQUIERDA QUE EN LA RONDA YA CASI AL AMANECER
LE HICIERA RECORDAR MIENTRAS RIDÍCULAMENTE RODABA POR EL PISO DE LA CANTINA EL FULGURANTE BRILLO DE LAS ESTRELLAS QUE EN SU DIEZ Y NUEVE AÑOS DE POLICÍA NO HABÍA TENIDO TIEMPO DE MIRAR

La libertad y la prisión no se deciden en una celda.



EL DÍA CUANDO BAYARDO VERA, PEPE BARROETA, EL CHINO VALERA, JUAN PINTÓ Y EL POETA ACEVEDO VISITARON LA CIUDAD
Mi madre al amanecer está pensando

Tus amigos no van a soportar

la pequeñez de la ciudad

(las ciudades pequeñas les tienen sin cuidado)

El sol de esta época es demasiado fuerte

y les va causar gran malestar

No hemos conseguido los vinos de ocasión

y lo peor son tus amigas

parecen poco interesadas con nuestros visitantes

Hay siempre mujeres en medio de hermosos cuadros

Hay mujeres indispensables en los grandes poemas

¿Acaso ya no gustaran de los poetas?

Un mujer nos falta para sentir

los boleros de Javier Solís

y ustedes saben de lo que estoy hablando

Una mujer nos falta al abrirse en dos

las puertas del viejo templo

y ustedes saben de lo que estoy hablando

Una mujer bien nos puede ocupar la vida

y ustedes saben de lo que estoy hablando


Mi madre dice cuando amanece

“A tus amigos

les encantará el tamaño de la ciudad

porque están cansados

de hacer notar su importancia

y las ciudades pequeñas les vienen a la medida

Abunda el sol en esta temporada

y ellos saben disfrutar del buen clima

Además traerán sus propios vinos

y eso nos ayudará grandemente

Y lo mejor son tus amigas

no han hecho ninguna pregunta

de seguro les guardan una sorpresa

imposible de olvidar”




CAUSALES POSIBLES PARA EL EXILIO DE LA CIUDAD
Por la orden de un mendigo

y la súplica de un rey

Por la flor de Ardesiempre

volviendo amores la pura lejanía

Por el fantasma que gira hasta el amanecer

en la fatal esquina de su muerte

Por la soledad adulta apretándonos el otoño

Por la madera que fue espada

de una guerra solitaria perdida allá en la infancia

Por Medianoche mi bruja preferida

que ha escrito su nombre bajo los senos

donde bebí el único sabor del hechizo

y la dulzura

mientras subía hasta las nubes

como un pájaro bajo el cielo perdiéndome.



DEBE HABER UN LUGAR EN NOSOTROS MISMOS
Hay días en que no queman las brasas

escribirse pueda una proclama

caminar sobre las aguas sea posible

o agotar con nuestra paciencia

la bella dureza de las armas invencibles

Al fin y al cabo

nadie puede culparnos de amar sin explicaciones

Días cuando basta salir de los hastíos

sin peso sobre los hombros

ni enemigos a vencer

y ya que somos

un pájaro cualquiera en la plaza

soñar una canción.



DESAMOR BAJO UN PRODIGIOSO OFICIO
El trópico es el cuerpo que habita los boleros

el hombre desnudo y su trabajo de herrería

la muchacha escolar tan fértil como un mito

una palabra que multiplican los verbos

nombrando la pasión y los misterios

por lo tanto

no dejes andar libremente al recuerdo

retomando la canción y los versos entrañables

Saboreaste tu momento

tal cual lo exigió el deseo

una a una cada locura tuvo su lugar

sobre la carne fuiste plenamente la diosa del amor

y quizá

sólo quizá todavía seas soñada para un sueño.


ENVEJECIENDO EN PUERTOS EXTRANJEROS
Siempre de todo lugar recibimos un adiós

Ese mar común

que ahora me coloca entre las tempestades

de ida y vuelta hacia los océanos

es apenas una ola en la memoria

Fuimos el tesoro oculto tras la arena

el faro deseado

el encuentro posible

pero ya no más y me resigno


Un poco de sitio solamente deja para mí

la roca milenaria de agua

que soporta mis manos

satisfechas de sal y recorridos

cansadas de tener por nocturno el día mismo


Cuando abunda la distancia aparento verla


Los barcos que reflejan mis ojos

hace años torcieron sus brújulas

hacia otros muelles

y yo espero partir alguna vez.



TODO LLEVA TU NOMBRE Y TU SOSIEGO
Sé que enciendes una hoguera

para abrirnos sin prisa la hora del primer pan

atrapada y soñolienta


Sé que tu palabra muestra una llave

y lo que esperas hoy del cielo


Sé del jardín que está marcado por lunas

y lluvias previstas en tu calma


Sé cuánto sabes del paso ruinoso del cartero

que aturde tras la puerta

y nos llena de esperanza


Sé que eres café y aroma

bajo la sombra del tiempo

esa risa blanca en la ventana


Sé que por nosotros

has bebido largamente los sorbos del tropiezo


Sé que eres mi madre

y sabes que te amo.




SOY DE AQUÍ, USTED LO SABE


A Francisco Pérez Perdomo

Este es el mundo naciendo de un proverbio

de las promesas irrompibles

a los dioses esperados

de la serenidad primaria perdida inútilmente

de un pez que saltando rompe el silencio del agua

de la montaña nuestra para el rapto de un sueño

de la cabeza del tigre de oro

que mata y embellece entre las sombras.


Este es el mundo naciendo de un proverbio

de aquellos pasos esquivos del amante

su mirada sigilosa inolvidable

de aquellas palabras seguras de la amante

(nada me importa la vida)

de los astros que trazan las rutas de cacería

de Ezequiel Isaías Daniel y Juan

que han nacido del vientre y no de la Biblia

de Sara Judith María y Magdalena

que no son la Biblia sino el vientre

de una cruz sobre el pecho

que nos dice del bautismo.


Aquí fue puesta en marcha la fertilidad de la tierra.



(Carátula de la edición de 1987)



VÍNCULO


A San Carlos
A qué hora fue nuestra llegada hace siglos

para invadir esta comarca de pájaros

¿Se miraba ya las antiguas estrellas

o fue la luz de nuestros ojos

quien nos salvó del ciego mar de los pesares?


Y hablaron largamente tu nombre

dividimos reinos sobre tu reino

y alumbraron mujeres tu permanencia

Local de frutos recientes


Ciudad de la abundancia en los patios

Las palabras como amenaza divina

la melancolía de los monjes primarios

y los planes perfectos de la guerra

La aparición audaz del poema en el hombre


A ratos mueres necesariamente

porque así es necesariamente la vida

Ciudad de Pestañas largas

Blanca estación de las aves

(Carátula de la edición de 1992)

VINCULO PERENNE
Como quien anda callado

para ser comprendido

Como quien regresa victorioso de de una batalla

llevando por semblante la derrota

Como quien nada pregunta al saldar sus viejas deudas

Así entre sus largos parajes

vivieron los hombres de la llanura


José Daniel, el Joven

hijo de Enmo

hijo de Evangelisto

hijo de Juan el Viejo

supo del caballo perdido hacia las montañas

la ruta a seguir tras sus huellas

la cuerda necesaria para no lastimar su piel

¿Quién entonces llegó tan lejos

hasta hablar contigo Juan y avisarte

tardíamente

que aventurabas un sueño?

¿Quién te convenció que ese caballo eras tú?


Hombres habituados a las maravillas

De ellos comenzó una edad

que ahora compartimos





(Carátula de la segunda edición de 1992)





ESTE MIRARNOS SIEMPRE EL PROPIO ABISMO
Interpreto el río

regresando de mis ancestros

salpicados perennes del helecho

Es mío por su apariencia

entre las aguas que adoraron

(A ratos roca a ratos un espíritu)

El escorpión que está en la orilla

me combate

en la memoria de la arena

Eres tú el almirante

capitán Escorpión


La muerte pierde su tiempo

bañándose en nuestros ojos.




PARA QUE EL OLVIDO ABREVIE SUS VISITAS
En este retrato gris e imagen densa

nadie se mueve o quiebra la calma

Padre muy al centro casi perfecto

todavía molesto por mi tardanza

(a culpas del primer mago que vieran mis ojos

bajo la carpa de un viejo circo sin tradición)

Madre preocupada por la iglesia

(Nadie sonríe)

María -la ajena a casa-

al lado izquierdo sentada en una gran silla

(la suerte de su fortuna enaltecía la familia)

la visible trenza dorada que perfectamente

asalta esta curiosa imagen de solemnidad

El patio a un costado de mis hermanas

Sarita muy triste (quién lo diría)

la tarde en Arminda enloqueciendo los rostros

Yo ni al fondo ni de frente

simplemente desaparecido.