lluvia
mujer
y magia
atravieso
huesos
y
me voy.
En
el conjuro doy vueltas
y
en una copa de cristal
te
entregas.
Traigo
los pájaros de la noche
en
mi mano izquierda
y
los pájaros del día
en
la derecha.
Con
placer hago pacto en el bosque
y
me bautizo en la sangre del paraíso.
VEN
sólo
con tu espíritu
y
sube.
Bésame
en medio de estos árboles
lleno
de un oculto deseo
con
todos tus grandes gestos
con
ese sabor de agua en los labios
arráncame
deshójame
con placer.
Ven
sobre todas las cosas
y
pasa tu mano
donde
mi don de fiera se levante
y
cálmalo misteriosamente con tu piel.
Ven
ahógame
en ti
y
déjame correr
porque
siento la noche oscilando en mis sueños.
Ven
despacio
y
con el alma fragmentada
para
que instintivamente
no
hay divergencia de tiempo
ni
diferencia alguna de verbo entre los dos.
AHORA
que
arremetes contra la noche de mi espíritu
mientras
te pienso en la ciudad hay incendio.
Ahora
que dominas el recuerdo y las calles son eternidad.
Porque
eres carne. Porque eres tinta que derrama.
Porque
eres hueso que se rompe en los amaneceres.
Porque
eres palabra y océano perdido
Porque
eres misterio y cambias con las nubes.
Porque
eres tiempo y vigilia y lenguaje.
Porque
eres infancia y música entre mis manos que escriben.
Porque
eres sorbo y mis labios te esperan.
Porque
apareces en mis sombras dormido
Porque
eres mar que mira desde el fondo.
Porque
eres hoy y el tiempo no corre ni transita por mi cuerpo.
Y
eres aire que toca y me baña y voz que no llega
candelazo
que azota y muerde.
Porque
eres reliquia y plegaria y fuego
y
alquimia que mancha y aroma de clavos
incienso
que brota de lo más sagrado.
Porque
eres línea y página y número cardinal y caballero andante.
Porque
eres historia y tu nombre se pega a mis huesos
y
eres licor y copa dormida en mis adentros.
Porque
eres estrago y magnitud.
Porque
eres hombre.
LA
doble
noche ladra tras los matorrales.
Llena
de frío se ausenta
y
llena de humo se esconde.
Me
habla de la lluvia que se acerca
de
la alquimia que sorprende a tu mirada
y
del misterio de mi casa.
Me
habla de la angustia
y
el desierto de tu boca.
del
espíritu y la luz de su secreto.
Me
dice de la tierra de mi padre
del
amor infinito y la palabra.
Del
principio gallardo en mis ancestros
y
el tiempo de tus soledades.
Me
dice del espacio y el recuerdo
de
trópicos y mares.
Me
cuenta de tu carne estremecida
del
hechizo y el fuego de la tarde.
De
tu nombre –bíblico por cierto-
y
sus andanzas.
Del
encuentro y los viajes siderales.
La
doble noche me espera.
LO MEJOR DE LA CIUDAD
ESTÁ EN TUS OJOS
Lo
mejor de la ciudad está en tus ojos
en
el camino que sostienes con la boca
en
el amanecer que me entregas.
En
el árbol de almendros de mi infancia
en
las semillas que reparten sus colores cerca de las cabañas
y
las piedras y el ruido arcaico de los ríos.
En
la sangre derramada y las barbas antiguas
traspasando
el frío de la noche.
En
el camino de las princesas y el paso de los mercaderes
con
sus tapices amargos y duras frutas de la aldea.
Lo
mejor de la ciudad está en tu piel de recónditos placeres
en
su travesía milenaria y flores secas
y
coloridos cielos ancestrales.
En
el norte, en la llovizna, en la montaña y el asombro.
Lo
mejor de la ciudad está en tu carne
en
las viejas casas de mi abuela
y
en la arrepentida palma que me cubre
en
el encuentro.
Silvestre
es tu amor recién nacido
de
colinas y mares eternos.
Primigenia
es la sombra que nos une.
Canarias
sólo
podré decir de ti
cuando
mi espíritu sea una pasión enceguecida
y
mi boca una trampa para amantes.
TRES POEMAS A CHELÍA
(Para
celebrar el I Aniversario de Transfiguraciones, estos tres poemas de mi libro
inédito: Ese oscuro fuego que me baña)
"Afortunadamente
nadie muere
de amor en estos tiempos".
de amor en estos tiempos".
Ramón
Elías Pérez
Al
escándalo de tus ojos
No
quisiera perderme el lúdico paisaje de tus ojos llenos de sol.
Parpadeantes
diversos
atrevidos
constantemente
abiertos como la llanura.
Los
descubro enternecidos
detrás
de las puertas.
Los
retengo fulgurantes
en
mi piel
llenando
todos los espacios.
Me
dirijo a cualquier dimensión orbital
Y
por fin
los
cuajo.
Entonces
me recreo en ellos para siempre como en una pintura de Salvador Dalí.
Conjuro
Me
hubiera gustado sorprenderte a las 5 en punto de la tarde.
A
esa hora se sirve el café
Y
los pájaros dan vueltas en el guanábano.
Comienza
un ritual hasta tus ojos llenos de esperanza.
Me
desbordo sin piedad
Y
desde aquí
Te
nutro de este amor absoluto sembrado de naranjos.
De
albahaca y ruda te ofrezco la lluvia para tu cuerpo insolente
Enciendo
tres velas
sólo
tres velas para la claridad de tu memoria cautiva
y
te invoco en el humo solitario.
Ahora
te canto, simplemente te canto
Con
voz de tonada.
Son
las 5:46 pm
Y
te lanzo mis últimos deseos:
Ojalá
tengas tiempo para leer un poema de Roberto Juarroz
donde
el milagro furioso de las palabras
como
lluvia vertical
te
arrebate
y
al menos te detenga.
Para
olvidar tu voz
He
cruzado toda la ciudad en moto taxi para olvidar tu voz
Tus
palabras me persiguen de Montalbán a Bejuma
y
aun entre los árboles tu eco me traspasa.
No
tengo escapatoria.
Intento
remontarme desesperada a las frías montañas de Chirgua
y
sólo consigo que tu hilo de vocablos trepe y me desnude.
No
puedo vencerte.
Emprendo
nuevamente el viaje
y
camino por las piedras y los ríos solitarios para zafarme de tu garganta
inclemente
Entonces
descubro el desvarío insensato del momento.
Pero
antes de salir de tu comarca
me
rindo a tu embrujo y tu capricho
Ya
me tienes por completo entre tus brazos y terriblemente acorralada.
¿POR QUÉ ESCRIBO?
Con
algo debo pagar la tradición sensual
ser gitana en la carneen el alma
ser gitana en la carneen el alma
M.H.M.
Mucha
gente me pregunta, en cada conversación, en cada esquina, el porqué escribo, y
aparte de ser una necesidad vital, una manera de volar y transfigurarme, digo
que hay un misterio que rompe los sentidos, en mis noches se acerca, me
envuelve los poros, me toma por sorpresa, un orgasmo musical se enfrenta a mis
ojos que brillan, mis manos se mueven, es otra, la morocha quien escribe, le
brotan las palabras, se arrancan a la noche, la doble, y me habla, me dice, me
cuenta de otros tiempos, lejanos, mis sueños me gritan, es ella, que viene,
despacio, adentro, flota, emerge, espíritu guerrero, antiguo, es mi abuelo, es
Fermín, es Cuba, es Canarias.
Sangre
bendita, la palabra, los versos, es por eso, es por eso, el oscuro, el fuego
que me baña, otra vez, la luz, la primavera, la lluvia, es licor, furia que
arremete entre mis manos, que lloran, que ríen, que buscan y saltan, la montaña
está cerca, río embrujado, su néctar, su esencia me roza, penetra en mi pecho,
se mueve una pena, encima me quema su rayo de luna, me marca, me define, es
mía, es mía su armadura de misterio, carga de boleros detenidos por el alma, su
silencio pertenece algún lugar del corazón, y su destino, mi palabra, que
deshoja todo el viento, que atormenta, que gira, es arena movediza, se cobija
entre las nubes, remontando hasta mi casa, se mete en mis cabellos, que luchan
con la vida, en las calles, mi ciudad es un espejo que mira por dentro.
El
mundo es grande y vuelo, me hago brisa, es el momento claro en mis ojos, que la
anuncian, la esperan, en recuerdos, me acostumbra a la duda y me rompo, en
celos, rabia, llanto y aparece de nuevo, me lleva, los árboles secretos de mi
angustia, la presienten, es ella, que suena a piedra memorial, delirio de los
bares, nocturna, noctámbula, es ella, es la metáfora, es la metáfora, estoy
presa, poseída, la locura de tenerla cerca me acompaña, para siempre, es por
eso, es por eso, por su fuego que me baña.
MILEIBY
HERNÁNDEZ Nació
en Valencia, estado Carabobo, Venezuela, un 23 de mayo de 1970. Actualmente
vive en Montalbán, estado Carabobo, Venezuela. Poeta, ensayista, columnista,
educadora y chef pastelero. Licenciada en Educación Mención Lengua y
Literatura. Premio Municipal de Literatura Mención Poesía de la ciudad de San
Carlos, Cojedes, 1988. Pertenece al Círculo de Arte Nuevo Tramo de San Carlos,
Cojedes. Ha
publicado: De Regreso en las Sombras y tiene inéditos los poemarios La doble
noche nos habla, Ese oscuro fuego que me baña y Del libro de los dioses. Sus
poemas se encuentran en antologías, revistas y periódicos nacionales e
internacionales. Actualmente cursa estudios de Maestría en Literatura Venezolana
en la Universidad de Carabobo, donde también es docente de Literatura
Occidental I y II.
La poésia, es realmente una una fuerza que llega hasta los mas imfinito de nuestra alma, y este poéta Raday Ojeda, tiene una larga carrera en la Literatura. Este texto adquiere un caracter de la poésia Venezolana del futuro y que llega con gustos a todos los lectores.
ResponderEliminarBella poesía. Se agradece esta lectura.
ResponderEliminarUn abrazo.
Excelente poesía, agradecida de poder leerla. Realmente es un lujo tantos autores dignos que nos presentáis. Dejan huella.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hermosa los versos de esta poeta. Un abrazo.
ResponderEliminarQué delicados versos, realmente un gusto leerlos. Muchos saludos.
ResponderEliminarPreciosa compilación. Me gustan en particular "Lo mejor de la ciudad está en tus ojos" y, naturalmente,dado que me siento profundamente identificada con las respuestas a esa vital pregunta, me gusta mucho "¿Por qué escribo?".
ResponderEliminarLamento discrepar con la cita de Ramón Elías Pérez: creo que si esto es verdad, se trata de un hecho desafortunado. Pero por lo que he notado en mi paso por la vida hasta hoy, mucha gente aún muere de amor en plena modernidad líquida, tal como la describe el interesante pensador Zygmunt Bauman. Recomiendo la lectura de sus estudios sociológicos de nuestro paradigma en pleno siglo XXI.
¡Un cordial saludo desde Buenos Aires, Argentina, y gracias, estimado Isaías, por difundir Poesía!
Fer
Me han ganado esos versos con la pasíón e intensidad que destilan. Ha sido un placer leerlos. Un abrazo amigo. Gracias por compartir.
ResponderEliminarTienen nervios y sangre.
ResponderEliminarBuena lectura ;)
Muchas gracias Isaías, muchas gracias lectores, el placer es mío. Mileiby Hernández Méndez.
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