Páginas

lunes, 4 de enero de 2010

Cofradías. San Juan Bautista y San Juan Niño. Fotografías y poemas



San Juan Bautista, llevado por devotas bailarinas de la Fundación San Juan Bautista Niño.  
Caso curioso: en Venezuela las danzantes le dan vida,  desquitando,  que otra bailarina: Salomé le hizo cortar la cabeza por el sanguinario rey Herodes. 


Suena el tambor su quejido

brotan con alma acentuada

las cantas emparrandadas 

no las  frenan los latidos

los corazones encendidos

claman al Bautista la virtud   

cuando dio al mundo su salud

por fusionarse con Cristo

en portento nunca visto

con entrega y rectitud.


*Imagen portada por María Martínez, integrante universitaria 
de la Cofradía de San Juan Niño, año 2007

Saludos. Abrimos nuestra bitácora con este enlace dedicado a San Juan Bautista y San Juan Niño. Estas gráficas pertenecen al Proyecto de Servicio Comunitario "Conservación de la Literatura Oral y la Religiosidad Popular del Sector Cerro San Juan", desarrollado por la UNELLEZ y la Fundación San Juan Bautista Niño (fundada en 1975), junto a distintas cofradías, instituciones culturales, cultores populares y vecinos, en San Carlos, Cojedes, rincón llanero de Venezuela. De antemano nuestro agradecimiento a los numerosos estudiantes, cultores y amigos que nos hacen llegar estas gráficas. 

Las cofradías dependen del factor humano que los apoye. Aquí se aprecia un grupo de estudiantes la UNELLEZ-San Carlos durante un Velorio de Cierre o "bailorio" de la  Cruz de Mayo, ceremonia que abre las fiestas de San Juan Bautista y San Juan Niño.


¿Qué se le canta al santo?

Muchos de los cantos adoratorios a San Juan tienen el sello de la personalidad rebelde de este patrono de los pobre que nunca se rinden. Veamos estas coplas de Freddy Sosa Llovera, reconocido líder de la cofradía San Juan Bautista Niño:

 Yo vi lágrimas rodar

por el rostro de San Juan

buscando el porqué a sus hijos

al templo no dejan entrar.

 



Aunque los llamen paganos

no te importa la razón

sigan tocando y tocando

y reciban la bendición.

  
Tamboreros de la cofradía de San Juan Bautista Niño 

"Dejad que los niños vengan a mí, dijo Jesús. San  Juan Bautista Niño simboliza la esperanza que renueva el espíritu y la vida de los devotos. Inocencia y pureza. 


¿Cómo es el Velorio del Santo?

Según nuestra interpretación el Velorio de San Juan comprende una primera fase que es de carácter hogareño, en las casas los devotos dan preferencia a las imágenes de este santo y la adornan con frutos, licores, velas y flores, tal como ocurre con los altares (segunda fase) que se colocan en las puertas de las casas para esperar el paso de una caravana o procesión "Al son del tambor" y el paso coreográfico de grupos de baile (tercera fase). Estos devotos culminan su labor en un espacio comunitario donde se hace un festejo central del santo (cuarta fase), se agrupan las cofradías y devotos dando rienda suelta a los rituales que cada suele hacerle, y que por lo general son replicas ampliadas de la veneraciones hogareñas (primera fase). Freddy Sosa Lovera lo canta así:

 

San Benito y San Antonio

se unen con devoción

que sigan tocando los negros

que sigan la procesión.

 

La Chinita, la Coromoto,

la Virgen del Carmen lloró

se unen con la parranda

y que siga la procesión.

 

Que no termine la fiesta

algarabía por montón

que va llegando a la fiesta

el santo llamado El Bailón.



Aunque la bailarina Salomé pidió su muerte, en la tradición popular las bailarinas le devuelven la vida, tal como se aprecia en esta recorrido; las imágenes de San Juan Bautista encabezan la marcha y luego la de San Juan Niño.


¿Qué más le cantamos al santo?


Es el manto de San Juan

adornado con colores

que va arropando tambores

que le vienen a tocar.


El autor de este poema recibe reconocimiento nacional en el Encuentro de Sanjuaneros
 en La Victoria, estado Aragua. 


Suenan campanas alegres

bailan al son del tambor

negros y negras cantando

hasta que despunta el sol.


Se escucha una algarabía

y una voz se deja oír

al compás de los tambores

que comienzan su festín.

 

Un negro sigue tocando

un canto de golpe y fulía

mientras San Juan va llamando 

un sangueo con alegría.

 

Recorre las calles el santo

con adorno y lirios blancos

y en la esquina de la iglesia

un coro de niños cantando.

 

Es la fiesta de los santos

del esclavo y del indio,

de las costas, de los campos,

de la tierra y de los ríos.   


Bailarina de San Juan Niño y Diablo Danzante de San Juan 

La elaboración y custodia de los altares es un honroso motivo de orgullo  que le garantiza bendiciones a quien lo ejecuta. Los altares de esta cofradía incluyen: 1-Cruz de Mayo; 2- San Juan Bautista y San Juan Niño y 3-La Virgen del Carmen.

 El capitán de la cofradía hermana "Diablos Danzantes de San Juan Bautista" retira su máscara para recibir la "Bendición de la Lluvia de San Juan". Esta cofradía tiene una trayectoria de más de   130 años.



La tradición del culto a  San Juan Niño comienza muy temprana edad- Estos jóvenes suelen tener varios  años de práctica aún en edad escolar. 


El arribo de las distintas  cofradías es un "festejo" dentro de la fiesta e implica distintas coreografías y rituales de profundo contenido espiritual para los integrantes de cada agrupación.


En 2017, la agenda de fiestas a San Juan incluyó la Parranda de San Pedro y San Pablo

Diablo Danzante de San Juan  portando a San Juan Niño en las calles de San Carlos


Docente de la UNELLEZ-San Carlos bailando con la imagen de San Juan Bautista

Desde que salen los primeros rayos del sol del 24 de junio las bailarinas universitarias y las de la Fundación San Juan Bautista Niño -al ritmo trepidante de los tambores-  comienzan a darle calor a la fiesta. Las estrechas calles y sol de la tarde llanera no frenan el entusiasmo de la cofradías.

Una vez más,  con el compromiso de volver, las bailarinas que reviven a San Juan cierran con orden y alegría la fiesta ante sus compañeros y vecinos.



En la noche la cadencia del tambor y la dinámica del baile se apodera de la calles. Universitarios y vecinos continúan el festejo hasta el límite de sus fuerzas.

Gracias por su visita. Isaías Medina López